No hay poeta que no haya dedicado un poema a la poesía. Algunas veces para vituperarla, otras veces para encomiarla; otras tantas, para manifestar su profundo odio y, a la vez, su profundo amor. Efraín Huerta participa con su poesía, de un proyecto estetizante de la literatura. Es un poeta que conoce perfectamente la tradición literaria –y no solo la mexicana de su tiempo sino también la extranjera de diversas épocas o periodos–; y domina las formas retóricas y poéticas en la estructura del verso.
Asunción del Carmen Rangel López y Carlos Ulises Mata